Rayos X con nanotubos de carbon
Los científicos creen que esto supone un gran avance, ya que si los resultados siguen siendo positivos, con el uso de nanotubos de carbón se podrán fabricar escáners con una mayor capacidad cuya fabricación costará menos y que gastarán menos energía.
Este equipo demostró hace cinco años que se podría utilizar nanotubos de carbón como fuente de rayos X y recibió su primer patente en 2000. Antes de estos resultados, el diseño convencional de tubos de rayos X no había cambiado durante más de un siglo.
Tecnología de rayos X con nanotubos permite que el aparato pueda funcionar a temperatura ambiental sin requerir los 1.000 grados Celsius que son necesarios para que funcionen las fuentes convencionales. Otra ventaja sobre las máquinas tradicionales es que se puede utilizar esta tecnología para cámaras de rayos X de alta velocidad para captar imágenes claras de objetos que se mueven a gran velocidad.